domingo, 29 de noviembre de 2009

Frío y Temor

Frío y Temor

Capítulo I


Que frío esa haciendo, mi sangre se congela rápidamente; en esta inmensidad, presiento que alguien me mira, me vigila. No comprendo quién pueda ser, ni trataré de encontrar una respuesta, solo lo presiento.
Miré al Sol, pero aún así, el frío no dejaba de abrumarme en forma terrible. Sentí la sensación de asfixia como aquella vez, la del accidente en que quede atrapado dentro del carro y a punto de desfallecer.
No se si estaré loco, pero escucho claramente el movimiento de las olas y percibo en forma real el aroma inconfundible del mar. No se que sucede, incluso siento ese tan característico movimiento ondulatorio, ese vaivén que es típico de algún medio de transporte marino.
Todo a mi alrededor es obscuridad, un negro-miedo que flota en el ambiente, solo puedo comparar esa obscuridad con la inmensidad del infinito. Se claramente que tengo los ojos cerrados pero no se por qué los tengo así, no tengo sueño y se que no estoy durmiendo y si acaso esto es un sueño, se que pronto despertaré.
Sentí que una gota cayó en mis labios, es una gota salada, como si fuera de mar. ¡Oh Dios mio! de nuevo con estas ideas. ¿Qué acaso me encuentro en algún lugar irreconocible para mi? Tal vez, así sea.
Hace unos instantes, vi el Sol claramente, tan brillante y hermoso como siempre, pero ahora todo lo que alcanzo a distinguir es obscuridad y un frío terrible. ¿Qué hacer, alguien lo pudiese decir?...........Padre nuestro que estas en los..........No, no debo desesperarme, se que pronto terminará esta pesadilla........¡pero....no puedo moverme!, no puedo, me siento rígido y como si no percibiera ningún sentimiento; pareciera que me he convertido en un monstruo que no tuviese derecho a la vida......
Ahora escucho ruidos de seres humanos, parecen que hablan pero no puedo escuchar lo que dicen, al parecer una mujer esta llorando, pobrecita, debe de tener una pena muy grande para encontrarse en ese estado. Los ruidos se acercan a mi y..........y siento que alguien me levanta y me sostiene en lo alto, tengo una sensación de vacío dentro de mi, parecen que caminan, se vuelven a detener, la mujer llora con mayor fuerza, yo no se lo que esta sucediendo. De pronto, siento un cambio de presión, como si fuera arrojado de lo alto hacía el fondo de una cañada.


Capítulo II
(Epílogo)


Los hombres arrojaron el féretro al agua y este rápidamente se sumergió para ya no salir nunca más.


Fin


Sergio Alejandro

sábado, 28 de noviembre de 2009

El Brillo en la Obscuridad

Los contrastes en la vida se dan en todos los sentidos, el trabajo, la familia, el simple vivir, la diversión, la afición, etc., y qué nos indica........que simplemente existe la dualidad, la polaridad, la ambivalencia, la luz al final del camino, el "Dios aprieta pero no ahoga", el estar perdidamente enamorados y por una simpleza sencillamente distanciarse...........todos son contrastes, contrastes que hacen pintorescas nuestras vidas y que son ese condimento que la enriquecen a cada momento.


Hay una Perla en el Fondo del Mar
Hay una perla en el fondo del mar,
allá, donde los pájaros no vuelan,
donde las flores no nacen
y donde los rayos del sol no llegan.
.-.-.
En la obscuridad se ve la perla
grande y pequeña gota de cristal,
blanca por dentro y negra por fuera
igual que esa gran obscuridad.
.-.-.
Haya en el mar hay una perla
triste, sombría y sin hablar,
es tan bonita y no tiene dueña,
es tan bonita y no tiene mar.
.-.-.
En el fondo del mar hay una perla
donde brilla sin parar,
iluminando lo que le rodea,
iluminando la profundidad.
.-.-.
En el mar se encuentra perdida una perla
y nadie la puede encontrar,
la pobre quizá pudiese estar muerta,
o la pobre quizá no puede gritar.
.-.-.
En el fondo del mar
existe una gran ostra,
que para la perla es su hogar
en un lugar muy hondo del mar.
.-.-.
En el fondo del mar hay una perla
que respira vida y que sabe soñar,
que es más grande que pequeña
y que es más chica que el mar.
.-.-.
En el lugar más hondo
y donde todo es obscuridad,
se miran dos perlas saltonas
que son los ojos del mar.
.-.-.
Donde el frío se vuelve tiniebla
y la noche obscuridad,
en ese lugar donde nada queda
existe una perla en el fondo del mar.
.-.-.
Fin
Sergio Alejandro

La Estrella en el Firmamento


La Estrella en el Firmamento
Te extraño tanto
que si pasara un tiempo
sin saber de ti,
la rosa de la vida
me soltaría como un pétalo
y moriría.
Tu cara
que es el sol que me ilumina
se bien que me será necesario
en las noches obscuras
y llena de estrellas.
En ese momento
miraré al cielo
y veré la estrella más brillante,
cerraré los ojos
y pensaré que estas a mi lado.
Soltaré mi imaginación
y me dirigiré a esa estrella
y cuando llegue a ella
la abrazaré y miraré
tu rostro en ella.
Fin
Sergio Alejandro

viernes, 27 de noviembre de 2009

¿Merecerá la Pena?

.
. .El valor que tienen las personas para uno, no es calculable, no tiene un precio; simplemente nuestro corazón puede dicernirlo en algún momento o en alguna situación en especial. Los seres humanos somos contradictorios; recuerdo que se dijo en algún momento que por ejemplo, podemos alabar a alguien en múltiples cosas, estar enumerando sus virtudes y logros, quizá pudiésemos hacer una trayectoria inmaculada de él, solo que si al final agregamos a todas esas virtudes un "pero", echamos abajo todo lo bueno dicho anteriormente; es decir, podemos decir mil cosas buenas de alguien y si al final agregamos un pero, simplemente todo lo bueno se derrumba, se deforma. Creo que es demasiado difícil el poder lograr una congruencia en este aspecto, una amistad, un amor, una relación laboral, puede simplemente en un momento de enojo y hastío puede terminar de manera inmediata, de manera fulminante y por eso me preguntaba si las cosas merecerán la pena, merecerán la pena de hacer el esfuerzo por componerlas o simplemente el esfuerzo por recuperar lo perdido y desgraciadamente eso en ocasiones no s llega a hacer a tiempo...............pero ya sabe amigo lector, solo Usted tiene la última palabra. Buenas noches.
.
.
¿Merecerá la Pena?
.
Cuántas veces me pregunto
si merecerá la pena,
quererte como e quiero
para que tu no me quieras.
.-.-.
Cuántas veces me pregunto
si merecerá la pena,
que yo te siga esperando
para que tuya no vuelvas.
.-.-.
Muchas veces me pregunto
si merecerá la pena.
.-.-.
Cuántas veces me pregunto
si merecerá la pena,
anhelar tanto tu amor
si nunca voy a tenerlo.
.-.-.
Y aunque me haga ilusiones
y sueñe que eres mía,
la verdad es que jamás
obtendré tu cariño.
.-.-.
Muchas veces me pregunto
si merecerá la pena..
.
Sergio Alejandro

jueves, 26 de noviembre de 2009

¿Creo en Dios?
Una persona a la que quiero profundamente me cuestiono el por qué en dos o tres de mis escritos y poesías, mencionaba a Dios a sabiendas que soy un ateo empedernido; claro que pensé al respecto y voy a tratar de explicarles el por qué.
Es verdad que no coincido con el ideal pensamiento de lo que es Dios pero respeto profundamente la idea y opinión que tienen las demás personas al respecto.
Quizá la Mitología Griega es la que puede definir mejor la idea de Dios en el siguiente pasaje. Zeus, el padre de los Dioses griegos, divinidad suprema del Olimpo, molesto con Prometeo por haberlo desafiado al entregar el fuego a los hombres de la Tierra decide vengarse de él de la siguiente manera: Le ordena a Hefestos que modele en arcilla una encantadora doncella y le pide a los demás dioses que le proporcionen atributos, Atenea le enseña el arte del tejido, Afrodita el dote de las armas de la seducción y Hermes le da los atributos de la volubilidad las palabras engañosas y todos los dioses le dieron diferentes dotes, por último Zeus le entrega una caja y le dice...."Te doy esta caja para que la cuides y la lleves contigo, en ella van cosas que el hombre no conoce, pero no la abras jamás porque no imaginas lo que desatarías en la Tierra" y Zeus manda a Pandora a la Tierra. En la Tierra es recibida por Epimeteo, hermano de Prometeo y convive con ellos. Pandora que también había recibido el don de la curiosidad, no soportaba el pensar en lo que pudiese estar dentro de la caja y un día decide abrirla; inmediatamente después de hacerlo salen de la caja toda clases de enfermedades, pestes, dolores, envidias, etc, y Pandora no sabía que hacer, casi al final, cuando la caja estaba casi vaciada escucha una voz que venía de adentro de la caja y decía "Cierra, cierra pronto antes de que yo salga" y Pandora así lo hizo. Esa voz era la Esperanza, que fue lo único que quedo dentro de ella y de esa forma Zeus consuma su venganza sobre Prometeo al esparcir entre los hombres todos los males...........................pero, y la Esperanza..................la esperanza es esa fe que el hombre desea cuando las cosas terrenas ya no presentan una solución, por lo menos aparente; la esperanza es ese Dios que todos llevamos dentro, ese deseo que hace que podamos creer que todo puede ser posible, esa idea que nos permite mover montañas inclusive. Dios es la esperanza para los seres humanos, llamese como se llame, sea como sea, signifique lo que signifique, ese regalo que nos permite soñar e ilusionarnos, que nos permite hacer contra toda lógica, esa fuerza que nos permite continuar ante la adversidad, por eso, cuando se me pregunto el porque admitía en mis escritos la idea de un Dios, mi respuesta es que soy una persona con sueños, un ser con la esperanza en el prójimo, un hombre con ideas y creencias de que las cosas pueden ser mejores; quizá no necesito mirar al Cielo para pensar o creer en un Dios, quizá solo es suficiente el que vea la sonrisa de mis hijos, el que sienta que mi corazón late, en ver el diario sudor del trabajo para poder vivir, el poder mirar un atardecer, el poder llorar cuando mis sentimientos así me lo indiquen y sobre todo, el tener la esperanza en el accionar diario del ser humano, de ver el valor y el coraje por sobrevivir, y mi respuesta es esa; tenemos que tener esperanza, si ese concepto es Dios, creo en él, si es otra cosa, tendré esperanza de todas formas y quien puede decirlo, al fin y al cabo "Los caminos de Dios son inescrutables".
Pero como siempre amigo lector, Usted tendrá la última palabra. Buenas noches.
Sergio Alejandro



lunes, 23 de noviembre de 2009

El Fin del Mundo





El Fin del Mundo






Capitulo I


La pareja se dirigía con gran rapidez en busca de un lugar que los protegiera de la radiación. Todo a su paso era maleza seca, afectada y enferma, los troncos de los árboles yacían en el suelo, el cielo ennegrecido y nubloso, amenazaba con darles fin de un momento a otro; corrían desesperados, tropezando a cada paso que daban, levantándose del suelo una y otra vez, con un deseo de conservación casi sobrehumano, intentando así salvar sus vidas. De pronto Elena, vió una luz al final del sendero, se acercaron y Alejandro pudo distinguir una pequeña casa, comoda y acogedora..................entraron en ella presurosos, gritando a voces por si alguien se encontrara ahí. Alejandro revizó la casa y se percato de que no había ni un solo ser viviente a excepción de un perro que le ladraba temeroso de aquellos seres.
La casa era una Cabaña de diversión en lo más profundo de los bosques californianos; en la despensa, Elena encontró alimentos en conserva mientras que Alejandro prendía un buen fuego en la chimenea de la estancia.
Elena preparó dos tazas de cafe y las llevo a la estancia, se sento a un lado de Alejandro y se acurruco a su lado, él la abrazo y se puso a meditar sobre lo que había pasado......................
"Ese Domingo por la mañana, Alejandro se levanto muy temprano para preparar todo para el día de Campo, limpió la mochila, la revizó, checo todo lo necesario y se dirigió de compras al Super-mercado. Elena por su parte, preparó los alimentos e hizo una rica jarra de limonada muy fria".
Alejandro paso por Elena y los dos salieron rumbo a los bosques dispuestos a pasar felices ese día; ya dentro del Parque dejaron el coche estacionado y se dirigieron a escoger un árbol grande y hermoso que los protegiera con su gran sombra....Elena había llevado un radio portátil donde se podían escuchar las noticias cotidianas; estas no eran muy alagadoras, los conflictos internacionales habían llegado a su climax días atrás y se temía un decelance funesto; de pronto se escucho la terrible noticia "La Tercera Guerra Mundial a comenzado", los Estados Unidos protegeran al Estado de Israel del ataque Ruso, China avanza sus fuerzas al Oriente Medio, los Paises No Alineados forman un bloque de defen......las comunicaciones cesaron; Alejandro y Elena se dirigieron corriendo al estacionamiento; de momento vieron un resplandor que los cego momentaneamente; cuando llegaron al estacionamiento, todos los carros y las máquinas movidas por baterias dejaron de funcionar, sin saber que hacer en ese momento, regresaron al árbol donde se encontraban comiendo y se protegieron uno a otro. No supieron exactamente cuanto tiempo permanecieron inmoviles y a la expectativa, el tiempo paso sin el menor ruido, los animales no salieron esa noche, todo era quietud, incluso el gran árbol parecía doblegarse. En la mañana regresaron al estacionamiento todavía en un estado atonito y confuso; vieron cuerpos humanos sin vida, quemados, casi instantaneamente los dos sintieron que el aire les quemaba, corrieron por instinto a la espesura del bosque, lo hicieron sin parar hasta que se sintieron con cierta tranquilidad al llegar a la Cabaña.
Capitulo II


Después de haber analizado la situación, llegaron a la conclusión de que algun tipo de bomba de gran poder habría caido cerca del bosque, matandolo todo pero inexplicablemente no a ellos. Alejandro, estudiante de Física de la Universidad de California era experto en estos detalles. Recapacitó detenidamente y llego a la conclusión de que una bolsa de aire, cierto aislamiento geográfico y la orografía del lugar los había salvado momentaneamente de la detonación y de su efecto expansivo para quedar finalmente ante los efectos de la radiación.
Era ya de madrugada cuando se escucho un ruido en la puerta, la pareja semidormida en la estancia se sobresalto y temerosos fueron a investigar..............Alejandro se acerco a la ventana y vió que era un Coyote herido, Elena abrió la puerta, el Coyote entro de una manera agresiva. Elena, estudiante de Medicina en su tercer año, logró acercarse al Coyote y este pareció comprender, se dejo acariciar y cuidar. Elena lo examinó y comentó con Alejandro lo enfermo que el Coyote se encontraba:
___¡Este animal esta seriamente contaminado, comento ella!
___Si, lo sé, ¿No será peligroso?
___No lo creo, pero no tardara en morir, Oh Dios mio, qué es lo que esta pasando?
___Calmate, no desesperes, con eso no se lograra nada.

El Coyote murio al dia siguiente y su unica compañia fue entonces el perro que ese mismo dia le pusieron el nombre de Rocky. Inconcientemente no se atrevían a salir de la casa por temor a contaminarse y morir, aunque sabían que eso no servía para nada en lo absoluto.
Capitulo III


El Miércoles por la mañana se desato una fuerte tormenta con lluvia radiactiva, Alejandro no podía explicarse como se encontraban aun con vida y lo consideraba un verdadero milagro. Ninguno de los dos hablaba, pero sabían que esa situación no duraría por mucho tiempo, Elena se desesperaba en ocasiones, pero el la lograba calmar hablandole con serenidad. Después de la tormenta, Alejandro decidió salir a reconocer el terreno; escaló algunos cerros y observó un panorama que nunca se le olvidaría en su vida:todo el Valle estaba cubierto por una mancha roja que parecía flotar sobre el ambiente, esa mancha parecía devorar todo lo que estaba a su paso, tierra, arboles, cuerpo de animales y humanos, vió hacia atras de si y observó que la naturaleza estaba intacta y comprendió al fin porque ellos no habian sido alcanzados por la radiación.
La Cabaña se encontraba en el fondo de una Cañada y la cima se encontraba cubierta de arboles y cubierta por maleza y sobre todo en un punto estratégico. Miró hacia otro de sus costados y vió que la tierra ardía y los arboles eran consumidos hasta sus raices uno por uno.
Regreso a la Cabaña y en el trayecto encontró el radio de baterias el cual en su loca carrera habían soltado en la hierba, llegando a la cabaña, encontró a Elena preparando un poco de comida, prendió el radio, eran las 6 de la tarde y escucharon estas noticias: "El Mundo que conocemos, esta practicamente destruido, los sobrevivientes mueren por millones debido a la radiación, esta es una transmisión mundial y se cree que no abra sobrevivientes, esto es una grabación y se pide que....................", fue lo ultimo que alcanzaron a escuchar, no lo podían creer, comieron y se sentaron en la estancia a platicar.


Capitulo IV


El Jueves, Alejandro noto que Elena se encontraba un poco fatigada sin motivo, preocupado porque conocía los efectos de la radiación, se dedico a observarla el resto del dia.
El Jueves sucedieron cosas trascendentales, el clima comenzo a cambiar paulatinamente tornandose mas frio y esto sin causa aparente, después comenzo a subir la temperatura sin una causa aparente. Rocky comenzo a mostrarse nervioso y desaparecio por unas horas, parecía como si algo importante se aproximara, como si fuese haber un desenlace y formarse un caos. Elena hacia unos pequeños estudios y Alejandro algunas observaciones, estaban decididos a dejar escrito todo aquello que pudiese ayudar a personas futuras, si es que las fuese a haber.
El Viernes por la mañana Elena empeoro y a pesar de todos sus cuidados no mejoro, inequivocamente tenía todos los indicios de que estaba enfermedad por radiación, los síntomas de la radiactividad eran evidentes, no tenía nada para atenderla, y aunque asi fuese, nada podía hacer por ella. Alejandro salió desconsolado de la Cabaña y pensó en Elena, suplicó al cielo que no se la llevara, pero era por demás sabido que todo era inutil. El Sábado por la mañana Elena murio y Alejandro la enterro cerca de la Cabaña, a unos pasos de un gran árbol. Alejandro comenzó a sentirse mal, cansado, apesadumbrado y solo se dedicó a escribir, en un momento, cuando estaba haciendo esto noto que algo de su cabello caía sobre las hojas de papel, sabía lo que tenia, y con la calma ante lo inevitable, siguió esforzandose por hacerlo.
Capitulo V


Domingo por la mañana:

"He leído lo que he escrito en esta especie de diario y a una semana de haber empezado, se y comprendo que pronto morire. Extraño a Elena y deseo reunirme con ella. Espero que la persona que pueda leer mis estudios, conclusiones y también las de Elena se encuentran en la recamara, debajo de la cama.
Espero que la raza humana comprenda algun día lo tonto que hemos sido y las tonterias a las que llegamos.......en este momento ya no puedo escribir y lo unico que siento es no poder seguir cuidando a Rocky, siento su mirada suplicante que me dice: ¿Qué haces?, ¿Qué escribes? y no puedo contestarle.
Las lluvia radiactiva fue nuestro fin, porque permitió el paso de la radiactividad desbastando nuestras barreras naturales.....Creo que soy el ultimo ser humano con vida, acabo de observar a mi alrededor y observo que casi todo esta destruido, siento que no queda nada....... que Dios se apiade de...............



Epilogo VI



Paso el tiempo, paso mucho tiempo y de entre la destrucción y las cenizas, comenzó a crecer una planta, una nueva vida y esa planta nació en la superficie de la tumba de Elena, donde alguna vez existió un gran árbol.


Fin


Sergio Alejandro



sábado, 21 de noviembre de 2009


Realidad Perenne

I


La gran cabellera recorría su cuerpo
fragantes de aromas y divinos sueños,
su cuerpo postrado, inerte y sereno
suplicaba clemencia al Rey de los Cielos:
__¡Señor, perdóname, devuelvelo!
.-.-.-.
El silencio en la estancia seguía existiendo
y aquel llanto sublime, afligido y cierto
se perdía en abismos de mar de concreto:
__¡Señor, no puedo más, piensa que lo quiero!
.-.-.-.
La distancia pasaba y el tiempo a lo lejos
divisaba un rostro robusto y risueño,
__¡Acerquenlo pronto, pronto corriendo
que Dios me perdona y no quiero perderlo,
que yo ya e sufrido el horrible tormento!
.-.-.-.
__¡Tomó mi mano, firme y resuelto
y pensé que salía de ese horrible tormento,
más me dejo sola, parada y con miedos, pero,
yo ya no caigo de rodillas, porque no puedo!
II

__¡No quiero verla y mucho menos
pensar que la quiero.
Prefiero dejarla, no sé, vacía por dentro
y olvidarla del todo y pisar su recuerdo,
no quiero volver a ser ese hombre,
un hombre desecho!
.-.-.-.
__¡Me dio mucho, me dio todo
más no puedo perdonarla.
Pero aún así, medió el calor de un solo beso,
y el aroma perfumado de su risa,
su último recodo de inocencia
lo dejo plasmado en mis adentros!
.-.-.-.
__¡Yo era un soñador, pero ya no sigo siendo,
pensaba en el mar, limpio y verdadero,
no sabía de la ignominia, el dolor y el celo,
pero me enseño todo, blanco y negro.
La quiero, pero no quiero pensar en ello
porque volvería a caer y resistirlo no puedo!
.-.-.-.
__¡La levanté,
porque no soporte verla postrada,
pero tomo mi camino y a ella un deseo:
Que sea feliz,
triunfe y todo eso.
Volteo a verla y veo que se marcha,
emigra como ave primorosa,
pero para mí,
es un punto de silencio que se aleja.
.-.-.-.
Fin
Sergio Alejandro

jueves, 19 de noviembre de 2009

La Amistad, El Amor y El Retumbe de la Olas

Hola amigos lectores:


Hoy quiero compartir con Ustedes el concepto de Amistad y Amor.
Definitivamente los amigos se estiman, se quieren y quizá de una forma u otra pueden llegar a amarse, la pregunta es entonces: ¿La amistad hasta dónde podemos definirla, hasta dónde llegan sus alcances? Me queda claro que el ideal de dos personas que se aman es seguir manteniendo la amistad entre ellos, porque eso evita la monotonía y por lo tanto el aburrimiento. Pudiésemos decir que mantener la amistad dentro del amor entre las parejas, le da frescura constante a esa relación, la mantiene viva y latiendo con toda su fuerza, por lo que pudiera decir que el amor embarga la amistad.................pero, ¿La amistad podría contener el amor?....Creo que hay amistades sencillas; aquella donde dos conocidos se avistan, se saludan, comentan cosas y se despiden; están las quizá un poco más profundas donde la convivencia se da en llamadas, reuniones, regalos, favores, preocupaciones y demás....pero existen las profundas, aquellas donde la otra persona se torna en un confidente, un hombro, un respaldo y dependiendo de las circunstancias hasta en algo más, pero sería, creo yo, imposible el mantener una amistad con el amor incluido pues ese solo hecho hace abortiva su conjunción. La amistad no embarga el amor, es una ecuación que no permite que se tenga una solución; el solo hecho de conjuntarlas, las separa por si misma sino llega a más. Esta ultima combinación es un inicio a la transformación, o pasa al siguiente nivel donde la debe de embargar o se separa en partes donde no pueden existir.
Si me preguntan, ¿qué es lo que yo prefiero?.............claro, algún día se los diré...
Por lo pronto, les dejo una poesía, la cual es una de mis preferidas y que creo que esta muy a doc..............Amigos, pero como siempre, Ustedes tienen la última palabra...Buenas noches.




Escuchando el Retumbe de la Olas
Espera, anhelante me dijiste,
no te vayas por Dios que estoy a solas;
es desvelo el yo saberme triste
escuchando el retumbe de las olas.
.-.-.-.
---Esta bien, lo acepto, no te dije
que el amor debe cultivarse,
es un pequeño Huerto que en nosotros crece
y es posible que tienda a marchitarse.
.-.-.-.
Nuestro Huerto es algo grande,
y si algunas se marchitan, otras conservan sus hojas;
es un brillo que ellas mismas blanden
aunque teman el retumbe de las olas.
.-.-.-.
Fue un retumbe incesante en mi memoria
lo que hizo despertarme,
vi el pasado, vi mi Historia
y comprendí porque debo adorarte.
.-.-.-.
En la soledad obscura de mi cuarto
imaginé tus ojos y estos lloran;
no temas musite calladamente,
no escuches en tu tibia mente
el retumbe incesante de las olas.
.-.-.-.
Pensé dormirme, cansado por el día,
te imagine a mi lado, estando a solas,
quise tocarte, belleza de armonía
pues pasaba el tiempo, los días, las horas.
.-.-.-.
He despertado del sueño tan profundo
en que me hundí cuando las campanas doblan,
cerré los ojos y me quede soñando
en el retumbe eterno de la olas.
.-.-.-.
Se que me quieres y yo más te quiero,
no necesito palabras al decirlo,
más el que calla, que caro paga el precio,
del silencio, de las carnes, lo maldito.
.-.-.-.
Cuando como hoy, recuerdo yo aquel día,
en que tanto tiempo dure pensando a solas,
recorreme un miedo, febril melancolía,
al recordar que te quiero y te quería
cuando escuchaba el retumbe de la olas.
.-.-.-.
Fin
Sergio Alejandro


miércoles, 18 de noviembre de 2009

¿Cómo? ¿Cómo se puede hacer?

¿Cómo?
¿Cómo recordar el pasado
que nos regresa a la mano
cuando cerramos los ojos?
.-.-.-.
¿Cómo poder dar una mirada
en una obscura noche estrellada
cuando estamos solos?
.-.-.-.
¿Cómo poder darte la mano
y llorar como en aquel año
en que fuimos tan felices?
.-.-.-.
¿Cómo otorgarte mi recuerdo
si mi memoria ya se ha muerto
de tanto recordar?
.-.-.-.
¿Cómo decirte que te quiero
si no pienso ni recuerdo
pues mi flor se marchito?
.-.-.-.
¿Cómo y cómo me pregunto
porque sin respuesta yo estoy trunco
y no he vuelto nunca más a florecer?
Fin
Sergio Alejandro

domingo, 15 de noviembre de 2009

Tendremos cuando busquemos


Tendremos Cuando Busquemos
Tendremos lluvias
cuando busquemos aguas,
tendremos fuego
cuando busquemos calor,
tendremos hermanos
cuando busquemos amigos,
tendremos alegrías
cuando busquemos amor
.-.-.-.
Tendremos mares
cuando busquemos ríos,
tendremos cielos
cuando busquemos a Dios,
tendremos risas
cuando busquemos trigo,
tendremos compañía
cuando seamos dos.
.-.-.-.
Tendremos compañía
cuando seamos dos.
.-.-.-.
Fin
Sergio Alejandro

La Calma

LA CALMA
Es oír el murmullo de las olas cuando estas se encuentran dormidas y esperar que el canto acaricie con sus sonidos nuestra sonrisa.
Es ver las cosas desde el mejor punto de vista y que este sea el único.
Es soñar en que soñamos la dicha y pensar que esta sueña con nosotros.
Es querer que el calor acaricie nuestro frío interno y no dejar que ese frío congele ese calor.
Es mirar a nuestro lado y comprobar que todos somos iguales y que esa igualdad es verdadera.
Es saber que el humo blanco no es siempre un infierno pues puede ser un éxtasis de nuestra persona y un mensaje de paz.
Es comprender que la tranquilidad no lo es todo en esta vida puesto que el azul del cielo nos puede agitar con su intensidad.
Es desear las cosas buenas para no desear las vanas.
Y sobre todo, es el consuelo adquirido a través del tiempo y la enseñanza, pues lo que aprendemos con firmeza, es un embargo de grito y añoranza sobre las cosas que son antiguas y las que ya no existen.
Es buscar la osadía en tu mirada pues la osadía es el grito convertido en flama.
Es no esperar que lo que sembremos germine pues no todo llega a buena cepa.
Es aprender a no vivir con crítica para no aprender a condenar.
Es desear lo bueno para los demás sin ninguna envidia para no obscurecer el alma.
Es esperar de los demás lo bueno aunque sepamos que esto es muy difícil.
Es ir a un bosque y sentarse tranquilamente a esperar la caída de las hojas.
Es mirar a los demás de frente sin miedo y sin ninguna reserva y que estos nos miren y sepan lo que estamos pensando.
Pero sobre todo, es saber esperar cuando lo único que existe es la espera.
Fin
Sergio Alejandro

Lo que escriben los demás



Pensar en lo que escriben los demás, es tan interesante, es adentrarse en el mundo interior de las personas, es entender más íntimamente su significado por lo que, a través de sus escritos, los podemos conocer mejor. Conocer lo que sienten y lo que piensan, lo que admiran y lo que sueñan.
Podemos conocerlos de esa manera porque las letras impresas y sus pensamientos son el reflejo de su talento y de su alma, en síntesis, es la forma más sincera de su espíritu. Por medio de sus escritos podemos conoceros en realidad y no lo que aparentan. Claro que no me estoy refiriendo a profesionales de las letras como los escritores o los ensayistas, ellos son profesionales en el desarrollo de las letras y su buena difusión; me estoy refiriendo a aquellos que simplemente plasman sus sentimientos, para trasmitirlos o no a otros, me refiero a aquellos personajes que reflejan un gusto por plasmar algo, por querer maximizar ese Don que les permite deja huella de su existencia en esta vida, plasmar como piensas y cuales son sus opiniones de la vida en general.
Quizás, poniendo atención a lo que escriben los demás, lleguemos a descubrir una mente bellisimamente imaginativa y madura, y si es así, no la dejemos escapar, al contrario es aprender de ello para poder superarnos; es por eso que no nos detengamos y pensemos en "Lo que escriben los demás". Claro esta amigo lector, que su mejor opinión será la que cuenta.
Sergio Alejandro

A la Gente Solitaria


Pensamiento a la Gente Solitaria
Hace varios años, estando en Preparatoria tenía un amigo que lo sentía especial, especial en su forma de pensar. Era sumamente introvertido y en cierta ocasión me escribió lo siguiente en un cuaderno:
"Entre tantas preguntas que surcan mi mente, me pregunto, ¿Por qué no pensar? ¿Por qué no escribir a la gente solitaria?............Si, los conozco, son seres pensativos, serenos, que se afanan por algo; son gente soñadora que quieren cambiar al mundo sin salirse de si mismos. En su semblante sereno, inexpresivo, extraviado, surgen mil pensamientos que si los pronunciaran no terminarían en toda su vida. Son personas que se abren paso por el bullicio de la vida, expresando con una sonrisa lo que no dicen, lo que sienten más: ¿Por qué los Poetas le cantan al Amor, a la Vida, a lo Hermoso y no le dedican tan solo un poema a la Gente Solitaria"
Lo leí nuevamente y claro, hice remembranzas. La Gente Solitaria, aquellas que son bohemias dentro de su espíritu y sensibles en su alma, esas que pacifican el vendaval para si mismas, aquellas que en apariencia son ermitañas en su vida y sin embargo se encuentran llenas de compañía y de cosas, esas personas que atesoran sus gustos y defienden a ultranza sus ideales, aquellas personas que entienden que la Soledad no significa estar solo físicamente sino que saben que la Soledad significa el no tener como llenar sus vidas y sus ideas.
Me uno a mi compañero en su pensamiento y apoyo su pregunta petitoria:
¿Por qué los Poetas le cantan al Amor, a la Vida, a lo Hermoso y no le dedican tan solo un poema a la Gente Solitaria?
Como ya sabe, estimado lector, Usted tiene la última palabra.
Sergio Alejandro

sábado, 14 de noviembre de 2009

La oigo llorar por las noches

La Oigo Llorar por las Noches
La oigo llorar por las noches,
cuando el silencio embarga
y el Sol desaparece,
cuando el Crepúsculo
no forma parte del día
y cuando los pájaros
se sienten seguros.
.-.-.-.
La oigo llorar por las noches
y no puedo consolarla
porque no tengo nada
que decirle,
excepto que no llore más.
.-.-.-.
La oigo llorar por las noches
y me acerco a su lado
para ver que le sucede,
la encuentro mirando
al firmamento,
con la frente sudorosa
y la piel un poco enardecida,
más no deja de llorar.
.-.-.-.
La oigo llorar por las noches
y siento un deseo
incontenible de abrazarla
y consolarla,
más no se que decirle.
.-.-.-.
La oigo llorar por las noches
y sus ojos se ven rojizos,
su cuerpo se ve prendido
de falsa languidez,
su boca entreabierta
bebe lágrimas de amor.
.-.-.-.
La oigo llorar por las noches
y siento que nace una
duda en mi alma,
una duda
que me hace mirar al
cielo y sentirme raro,
una duda que en las
largas noches,
me hace que me escuche llorar.
.-.-.-.
Fin
Sergio Alejandro

viernes, 13 de noviembre de 2009

La llamada de un Espejo


La llamada de un Espejo
Capítulo I
A lo lejos se divisaba la Cordillera de montañas que se miraban imponentes aun a tan gran distancia. Un pequeño caserío parecía que se encontraba a sus pies aunque estaba bastante alejado de su base................de ese lugar, de los más recóndito de la montaña, ahí donde la luz del amanecer no llega ni siquiera a tocar, ni tan siquiera a acercarse, sentía el llamado inminente de una persona que era yo mismo, ese llamado que era tan frecuente parecía succionar mis pensamientos y que llegaba a quitarme la concentración que tenía por completo.
Sabía que ese ser, que era mi coexistencia tenía rasgos femeninos más no sabía el porque de esa comunicación, supuse que tal vez nuestros cuerpos y almas estaban ligados uno a la par del otro. Traté una vez y no con que resultados, hacer un retrato de ella guiándome por las sensaciones que a mi ser llegaban continuamente. Sentía el deseo de dirigirme a aquel lugar que me llamaba, más una inmensa pradera me separa de el.
Capítulo II
Siempre mantenía la mirada perdida en la cima de la montaña rumbo al horizonte y me percataba de que el cielo estaba claro. Cada día por la mañana, la fresca ladera era observable desde mi balcón y al paso de las horas, iba desapareciendo detrás de una tenue brisa color aire. Así, como el día comenzaba, comenzaban también mis labores, pero de vez en cuando eran interrumpidas por un misterioso llamado que acudía a mi mente con frecuencia.
¿Cómo siempre, mi objetividad era insatisfactoria para poder entender ese llamado o ese presentimiento tan extraño que ocurría a mi, libre y sin reparos. Más de una vez me puse a conversar con ese yo tan ligado a mi; platicamos no se que tantas cosas sin importancia, solo y de vez en cuando me daba cuenta de sus mentiras tan verdaderas que me decía y ella se percataba de las verdades tan mentirosas que brotaban de mis pensamientos; era un algo así, como darnos cuenta de nuestros errores y seguir con ellos sin cambiar pues nunca llegaban a estorbar nuestras conversaciones. Era el puente mejor construido entre lo dos más grandes abismos, entre los dos más grandes errores.
Capítulo III
Llego el día en que me tenía que decidir entre descubrir el misterio o seguir con la misma incertidumbre y armado con un poco de valor me decidí por la primera.
Muy temprano por la mañana tome rumbo a la montaña sin que importara la distancia que existía para llegar a ella. La montaña se vía como un punto en el horizonte que a veces se perdía entre la brisa matinal. El camino era pesado y por momentos sentía desfallecer y pensaba que todo era una tontería de mi imaginación, pero cada vez que sentía el deseo de regresar, esa voz misteriosa que me transmitía sensaciones de mi mismo, aparecía y me hacía recobrar el ánimo para proseguir.
Caminé, caminé como tal ves nunca en mi vida lo había hecho y la montaña que era como un punto lejano en el horizonte, empezó a aparecer ante mi como lo que era: un mounstro de piedra y granito, un refugio, un hogar de mi mismo.
A medida que me acercaba a la montaña, ya se podía distinguir en ella un poco de verdor con mucho de roca dura. El sol me ayudaba porque alumbraba mi camino y podía saber por donde me dirigía pero al mismo tiempo me impedía el paso porque a cada momento sus rayos empezaban a calcinarme por dentro; sentí el deseo inminente de gritar y así lo hice.
Que vació a mi alrededor, que soledad; solo el pequeño caserío que se encontraba a las faldas de la montaña era signo de que existía vida humana por aquellos rumbos, aunque siempre fui acompañado de mosquitos y lagartijas que eran para mi como una especie de confidentes los cuales por más tonterías que escucharan nunca llegarían a reírse de ellas, como acostumbran hacerlo la mayoría de las personas.
El calor era cada vez más fuerte y ya comenzaba a debilitarme cuando mi compañera (tal ves, sabiendo lo que estaba padeciendo) hizo que la montaña me prodigara su sombra ocultándome con su poderoso cuerpo de los rayos solares.
Sabía que ella me estaba esperando.............
Capítulo V
Llegué a la falda de la montaña y sentí su presencia cerca de mí, giré la vista hacía atrás logrando apenas la gran urbe de donde horas antes haLbía salido y tuve una sensación de impotencia, como si ya nunca fuese a regresar a ese lugar.
Poco a poco y lentamente fui escalando la montaña, la cual a estas alturas era enorme y empecé a buscar a mi tan anhelada persona. Ya estaba oscureciendo y decidí mejor mejor hacer un campamento y dormitar tranquilamente para reponer fuerzas y poder seguir la búsqueda al día siguiente.
No se cuantas horas tenía durmiendo cuando de pronto llegó un sueño a mi cabeza, el cual era más o menos el siguiente:
----"Me encontraba yo delante de un gran espejo, viendo mi propia imagen y sintiendo que había algo detrás de el; quería penetrar en ese misterio y me acerque, más no pude traspasar ese cristal que de apariencia era frágil, traté de romperlo sin conseguirlo y empecé a sentir una desesperación que nunca antes había sentido; me estaba ahogando en ese cristal"----
Desperté con grandes gotas de sudor en mi frente y mis manos sentían un escalofrío que comenzó a invadir poco a poco todo mi cuerpo.
Capítulo VI
Amanecía y comencé la búsqueda, la montaña era inmensamente grande y no sabía donde empezar la búsqueda, más una voz interior me fue guiando a través de la montaña haciendo que me empezara a adentrar en lo más profundo de ella; fue tan intenso todo esto que de pronto no sabía en donde me encontraba.
Cuando se me aparecía un obstáculo, una piedra que no pudiera escalar por sus dimensiones por ejemplo, algo o alguien me guiaba por senderos no antes conocidos por hombre alguno. llegó el momento en que empecé a sentir mucho miedo, un gran miedo a lo desconocido.
Después de escalar una pronunciada colina, detrás de un gran risco, donde solo reinaba el silencio y donde los pájaros no cantaban me detuve, dí un ligero paso hacía adelante; quede paralizado y no sabiendo que hacer quise retroceder pero una voz ya conocida para mi me lo impidió:
----¡Alejandro -me detuvo la voz- estaba completamente segura que vendrías!
----¿Quién eres tú? Pregunté sin saber quien me estaba hablando
---- Soy Laura
---- No te conozco, ni tan siquiera te puedo ver
---- No lo puedes hacer porque yo estoy en una dimensión diferente a la tuya.
---- Pero, ¿qué es lo que quieres de mí?
---- Eso es algo un poco difícil de explicar y no será fácil hacerlo
En esos momentos una luz cegadora apareció ante mi y a unos pocos pasos de donde me encontraba apareció un espejo, más o menos del tamaño de una puerta y parecía muy frágil. Eso me hizo recordar mis sueños; en el espejo no podía ver mi imagen y solo podía ver la imagen de una bellicima mujer la cual se encontraba dentro.
---- Ven, acercate a mí, inquirió ella.
Temía no obedecer pues su mirada era imperativa y me acerque con pasos lentos, muy lentos, pero ella parecía no tener prisa y solo me miraba. llegue ante el espejo y puse mi mano en el, más no sentí nada y ella que parecía estar haciendo un rito, puso sus manos a la altura de las mías. En ese momento sentí que el mundo giraba más de prisa y que yo adquiría una velocidad prodigiosa..............., cuando paso el aturdimiento todo parecía estar igual, excepto una cosa, la montaña solo me era visible desde el espejo y lentamente fui quitando mi mano de el.
Al poco tiempo ella, prosiguiendo con su rito, hizo lo mismo.
Capítulo VII
Sentí que estaba atrapado y comencé a desesperarme pues lentamente me estaba ahogando en ese lugar. Después de unos momentos sentí que se encontraba de mi lado toda la sabiduría del universo y la paz retorno inmediatamente en mí. En ese momento comprendí que me hayaba atrapado en una vida sin tiempo, miré a través del espejo y vi a Laura partir hacía la gran urbe de donde yo había salido.
Capítulo VIII
Epílogo
Ya tranquilo y sin saber el tiempo que a pasado porque me encuentro en un lugar donde el tiempo es inexistente y el aire es mi pasatiempo, empecé a hacer contacto con una muchacha de la gran urbe.
Fin
Sergio Alejandro