Soñar, ¿solo dormido?

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Tiempo Dormido

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Con los párpados cerrados

musitaba yo tu nombre,

imaginaba tu sonrisa

y escuchaba tu latir;

te veía yo en mis sueños

observando tu mirada,

perfumando los recuerdos

de un alma por vivir.

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Despertaba somnoliento

entreabriendo las ideas,

despejando de mi mente

ese engaño evocador;

retocaba yo tu imagen

entre luces de belleza,

desapareciendo siempre

al final de la oración

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Preguntaba embelesado

un por qué como respuesta,

no entendía de otra forma

el por qué me abandono;

más su imagen palpitando

me decía con tristeza:

¡Yo no te he abandonado...

fue el amor que se acabo!

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Fin

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Sergio Alejandro

01 de Enero del 2010