Sin Cerrar Círculos

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Amor de Veinte Años

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Queriéndola como yo la he querido

desde hace cerca de veinte años,

que importa que al corazón lo deje herido

rompiendo el alma al causarle daño.

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Era muy joven habiendo ya formalizado

madre y esposa formaban su vida ya completa,

¿Qué pasaría si ella no se hubiese ya casado?

figura celosa en mi mente indiscreta.

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Y de pronto Dios alivia el sufrimiento

pues sentía un abismo en mi pasado,

aparece un correo electrónico que pienso

AIsabela de su mano lo ha mandado.

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Y de pronto veinte años se transforman

en abono al amor que ha marchitado,

ella restaura su amor en cuatro formas

tres para sus hijos y para un amor unificado.

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Treinta meses de vivir con ilusiones

y treinta meses de vivir enamorado,

pocos años de tener mil emociones

de un futuro unido al ser amado.

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Y no todo en el amor son cosas buenas

y no todo en el amor son cosas malas,

el tilín de campanillas que renuevan

de la unión que el destino nos repara.

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Y ahí están esos dos seres que se quieren

y ahí están esos dos seres que se aman.

¿Por qué será que el amor entre más grande hiere

que de amar se te quita hasta las ganas?

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Y de pronto un enojo lo interrumpe

no se cierran los círculos mi amada,

gastada queda el alma por la herrumbre

llorando lágrimas ardientes por las ganas.

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Tu me alejas de ti y yo me alejo

¿En dónde está ese gran amor del que hablamos?,

ese amor que dijimos moriría viejo

y juntos siempre dándonos las manos.

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Nuestros íntimos encuentros se rompieron

truncando el paso de la sabia por el mismo,

nuestras células amantes sucumbieron

lanzando nuestro amor por un abismo.

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La ironía solo deja en nuestra esencia

un coraje evidente y al asecho,

¿Era nuestra amor la efervescencia

y no la ausencia de un deseo sobre el lecho?

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Importante ser para alguien en la vida

sin esperarlo fue una necesidad creciente,

en una solución consiente y atrevida

para estar dentro de su risa y de su mente.

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Se que ambos mentido hemos en la vida

de un hecho que ocurrió en si reciente,

sobre un lecho nuestras almas ya unidas

con tu llanto dijiste convincente:

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__¡Dejarme no lo hagas amor nuevamente!

y abrazado a tu cuerpo te respondo,:

__¡Te juro ante mi alma y mi mente

sola no, aunque caiga a lo más hondo!.

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Y creímos palabras bastaban para hacerlo

y nuevamente en verdad ambos mentimos,

tu, pues no soñaste nunca en creerlo

y yo, no pude lograr el compartirnos.

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Si esperase algún día que componga

esa caja electrónica del alma,

ese verso seguirá según disponga

esperando a que lo leas en tu calma.

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Decía en el que deseaba enterarme

y entender este cierre de destino,

y una duda constante al preguntarme:

¿No hay amor, tan así de repentino?

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Y pensar que después de amarla tanto

resuelve que amigos a empezar seamos,

no me induce amor en mi ese llanto

de esa idea que al final nunca acordamos.

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Y este amor no sabe si esta dejando

sus recuerdos y su piel sufriendo daños,

observó a la maldad salir triunfando

sobre ese amor que añore por tantos años.

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Fin

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Sergio Alejandro

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02 de Marzo del 2010