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Temor y Enojo

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La otra noche temerosa te escondiste

temerosa de un enojo inexistente,

un motivo presumiste tu que existe

cuando solo esa idea esta en tu mente.

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Paso a paso con sigilo te acercaste

a la estancia donde yo estaba dormido,

fue tu aroma que al paso tu dejaste

lo que hizo despertarme de mi limbo.

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Mi mirada te seguía a la distancia

satisfecho de pensar que estabas bien,

más recuerdos imborrables de la infancia

determinan el estar quizá con quién.

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Es la noche que alejando nuestros cuerpos

va cayendo como sombra entre los dos,

y es ella que llenando de recuerdos

crea nostalgias inaccesibles al amor.

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Yo quisiera recordarte que mi enojo

solo existe en tu mente y tu dolor,

no pensaste que a la vista de mis ojos

lo que mi alma a sentido es solo amor.

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Fin

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Sergio Alejandro

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23 de Octubre del 2011